Moyobamba. De una manera silenciosa, así se fue apagando la vida de la conocida docente Joicy Olórtegui Corimanya, quien dejó de existir en la ciudad de Chiclayo la tarde de ayer martes, luego de una ardua batalla contra el cáncer que le complicó su estado de salud.
La repentina muerte de la docente muy querida de la institución educativa N° 00491 “Martín Fulgencio Elorza Legaristi”, deja un gran vacío en los alumnos, padres de familia, colegas y de todas las personas que conocieron de la sencillez, amabilidad, ternura y todas las buenas cualidades que mostraba la profesora dentro y fuera de clases.
Sus colegas de siempre, como Javier Ríos Saavedra lamentaron el fallecimiento, pero al mismo tiempo la recordaron e hicieron una remembranza de cuando aún compartían en vida buenos y gratos momentos.
Consideran que fue y seguirá siendo una maestra ejemplar. Joicy Olortegui Corimaya siempre fue considerada como una docente laboriosa, alegre, contagiante de alegría muy recta en sus asuntos, pero muy humana cuando se trataba del prójimo, creyente de Dios, así como también radical en sus principios de lucha. Ahora solo queda ese ejemplo, para sus exalumnos, sus colegas y sin duda para sus hijos y en general para la sociedad.
Se tiene entendido que su cuerpo están siendo trasladado a la ciudad de Moyobamba para darle cristiana sepultura, lamentablemente y a pesar de haber sido una persona muy querida, pocos podrán acompañarla a su última morada, ya que se tienen que cumplir con ciertos protocolos y evitar la aglomeración en tiempos de emergencia sanitaria.
Diario Amanecer
