Un tremendo “terremoto” fue el que sacudió ayer los cimientos de la clase política peruana, y sus “consecuencias” han alcanzado incluso a varios congresistas de la República, entre ellos a 3 representantes de la región San Martín.
Ayer en horas de la madrugada, el Equipo Especial de Fiscales contra la corrupción del poder (Eficcop) y la Diviac realizaron el operativo Valkiria V con allanamientos de viviendas y oficinas, de los asesores principales de la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides.
Dentro de la tesis del equipo que encabeza la Fiscal Marita Barreto, la Fiscal de la Nación encabezaría una organización criminal, que buscaba canjear votos en el Congreso para determinados intereses, a favor de impunidad a los parlamentarios investigados, en casos como el de Los Niños, en el gobierno del recluido expresidente, Pedro Castillo.
En el documento fiscal, el número de “Niños” es mucho mayor del que se venía investigando, y dentro de este nuevo grupo se encontraban las congresistas Lucinda Vásquez, Karol Paredes y Cheryl Trigozo, quienes supuestamente habrían blindado con sus votos al hoy prófugo exministro de Transportes, Juan Silva.
Según se desprende de chats de whatsapp de conversaciones entre el asesor principal de la Fiscal de la Nación, Jaime Villanueva y un congresista, se canjeaban votos en el congreso para apoyar algunas iniciativas que eran de interés de la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, como la inhabilitación de la Fiscal Zoraida Ávalos, la designación del Defensor del Pueblo, entre otros.
A cambio del apoyo de los congresistas investigados por blindar con sus votos a los corruptos exministros de Pedro Castillo, se les pagaba presuntamente con la impunidad de los casos en los cuales se les investigaba.
Fuente: (Diario Amanecer)
