El Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) publicó este mes el estudio “Impacto del incremento de la remuneración mínima en el sector asalariado formal privado”. A través de una nota de prensa, la cartera indicó que el documento probaba que el incremento del sueldo mínimo en el 2016 y el 2018 generó un avance del 6% en la contratación de personal con salario mínimo.
Además, resaltó que los salarios promedios aumentaron en un dígito tanto para los jóvenes de 15 a 29 años como para de los adultos de entre 30 y 64 años.
En el 2016, la remuneración mínima vital (RMV) aumentó de S/750 a S/850 y en el 2018 se estableció en S/930. A partir de mayo del 2022, el gobierno incrementó el sueldo mínimo hasta los S/1.025.
Sin embargo, especialistas consultados advirtieron que los resultados publicados por el MTPE solo consideran a los trabajadores que se encuentran registrados dentro del sistema de emisión de boleta electrónica de la Sunat, lo que excluye de los resultados a los informales.
“En la planilla electrónica solamente están registrados los trabajadores formales, por lo tanto, el análisis de impacto que hace sobre los incrementos de la RMV solo lo puede analizar sobre si la gente sale de la formalidad y si le suben los sueldos, pero no puede determinar qué pasó ni qué va a pasar con la informalidad, lo cual es importante en un país con el 80% de informalidad laboral”, indicó Mónica Muñoz Nájar, coordinadora de Proyectos y Políticas Públicas de Red de Estudios para el Desarrollo.
“El informe no es concluyente, e incluso reconoce en su primera parte que los estudios sobre la RMV arrojan resultados diversos y dependen mucho de la composición del mercado de trabajo y de otros factores de la economía. El hecho de que consiguieran una data no significa que hoy se tendrá el mismo resultado, especialmente por la situación económica del 2022″, indicó Mónica Pizarro, socia del área laboral del estudio Echecopar.
Informalidad
Víctor Fuentes, economista jefe del Instituto Peruano de Economía, criticó que el MTPE solo resaltara el avance ligero en las contrataciones luego de que se aumentaran las RMV. Indicó que el estudio muestra que en el 2016 y el 2018 también hubo una caída en la cantidad de empleados en la planilla electrónica del grupo de tratamiento, es decir, de aquellos cuyos salarios se encuentran por encima de la antigua RMV, pero debajo del nuevo nivel de la RMV.
“En el 2016 en el mediano plazo, seis meses después de que se aumentara la RMV, se encontró que los trabajadores en el grupo de tratamiento tenían entre 1,3% y 2,3% más probabilidad de salir de la planilla electrónica. En el 2018, el efecto tanto en el corto como en el mediano plazo fue significativo, pero alrededor del 1%”, indicó.
Agregó que esta cifra no se puede considerar como pequeña. “Aunque sea 1,3% o 2,3% esto representa la salida de trabajadores de la formalidad”, remarcó.
El riesgo de perder empleo son mayores en los jóvenes.
“El incremento del salario mínimo del 2016 incrementó la probabilidad de que los jóvenes pierdan el empleo formal entre 1,3 y 3 puntos porcentuales en el mediano plazo, seis meses después del incremento. El aumento del 2018 también incrementó esa probabilidad, pero menos”, acotó Muñoz Nájar.
Fuente: El Comercio
