Saposoa. Nuevamente el alcalde del distrito de Piscoyacu, en la provincia de Huallaga – Saposoa, Nelo Pérez Fernández, vuelve a hacer noticia, pero no precisamente por las obras que podría estar ejecutando en bien de su comunidad, sino que por el contrario, ha vuelto a ser intervenido por las fuerzas policiales, tras cometer una serie de agresiones, en estado de ebriedad y desquiciado por los celos.
Según el testimonio de José Moreno, Coordinador Distrital de las Juntas Vecinales de Seguridad Ciudadana, el lunes en horas de la noche, recibió la llamada de una mujer, quien le pidió auxilio debido a que estaban agrediendo a su pareja. Al llegar al lugar, Moreno encontró que el denunciado como agresor era nada más y nada menos que el alcalde de Piscoyacu, Nelo Pérez Fernández, a quien le pidió en una primera instancia acompañarlo para retirarse sin hacer más problemas en el lugar, sin embargo, la furibunda respuesta del alcalde fue atacarlo con una piedra que tenía en la mano, con la cual le provocó un corte a la altura de la frente, ocasionando un profuso sangrado. Antes, el alcalde ya había agredido al chófer de un auto de transporte de pasajeros, identificado como Roy Marden Lozano Daza, a quien el alcalde acusaba de estar enamorando a una joven que resultaría ser amante del burgomaestre.
Tras la agresión, tanto el coordinador de las Juntas Vecinales de Seguridad Ciudadana, Carlos Moreno, como también la otra persona agredida de nombre Roy Marden Lozano, se dirigieron hasta la comisaría de Saposoa para asentar la denuncia, tras lo cual un contingente de efectivos policiales se dirigió hasta el distrito de Piscoyacu, hallando en su domicilio al burgomaestre, quien lejos de cooperar con los efectivos policiales, agredió con un cabezaso a uno de lo que intentó intervenirlo. Finalmente la autoridad edil fue reducida y trasladada hasta la comisaría de Saposoa, donde quedó detenido y puesto a disposición del Ministerio Público, para el inicio de las investigaciones por esta violenta agresión contra dos personas y un efectivo policial, además de estar inmerso en el delito de desobediencia y desacato, por estar tomando licor en pleno toque de queda.
Los dos agredidos y también el efectivo policial a quien el alcalde le propinó un cabezaso, acudieron hasta la sede de medicina legal en la ciudad de Bellavista, para los exámenes de ley.
