Cada vez son más los almacenes que implementan este tipo de tecnología. ¿Quieres saber por qué deberías implementar la tecnología RFID en el tu almacén? Nosotros te lo explicamos.
Actualmente, la tecnología RFID es el sistema más rápido para identificar y localizar de manera automática cualquier producto que precisemos. Este tipo de tecnología tiene múltiples aplicaciones, volviendo más sencillo tareas como catalogar, localizar e identificar todo tipo de objetos. Incluso los más cotidianos.
Lleva muchos años desarrollándose. Su implantación se inició en Estados Unidos, donde ha conseguido imponerse a otras tecnologías y logra estar presente en más de un 90% de las compañías americanas. Su mayor aporte es dónde tengan que realizarse continuos registros de datos, o dónde no se llevan a cabo por imposibilidad humana o coste. No obstante, los terminales RFID pueden ser útiles tanto en situaciones internas de las empresas, en procesos propietarios o en procesos de intercambio de información y mercancías entre diferentes agentes de la cadena.
¿Por qué no utilizar un código de barras?
Hay actualizaciones que hacen que una herramienta como esta pueda mejorar a gran escala su utilidad. Así, la identificación por radiofrecuencia lleva años en el mercado y ha ido mejorando todos sus «puntos débiles» convirtiéndola en la heredera oficial del tradicional código de barras.
Por supuesto, al ser una versión mejorada del código de barras, proporciona unos beneficios extras a las compañías que lo implementan, a continuación, veremos algunas de ellas:
- Mientras el código de barras tiene un espacio limitado en su capacidad para retener información, el RFID permite transmitir y almacenar las máximas cantidades de datos (hasta 64.000 bits) en los transpondedores.
- Esta tecnología puede identificar objetos sin una línea de visión directa, por otro lado, el código de barras requiere la máxima cercanía al objeto para escanearlo, te recomendamos conocer todas las características de la Tecnología RFID.
- Obtienes mucha mayor rapidez en lectura. El tiempo que tarda en leerse una etiqueta RFID es de 100 milisegundos, al contrario de un código de barras, que tarda un período de tiempo de medio segundo o más.
- Un código de barras no puede ser modificado una vez que ha sido impreso, por tanto, es una tecnología de solo lectura. En contra, los tags de RFID pueden tener la capacidad de lectura/escritura ya que cuentan con una memoria maniobrable que puede ser modificada miles de veces durante su periodo de vida.
- Si nos adentramos en su período de vida, cabe resaltar que puede soportar ambientes agresivos, y, por ende, suele ser mucho más amplio que el del código de barras debido al desgaste por contacto.
Utilidad del RFID en un almacén:
Uno de sus usos más comunes, es para dispositivos contra el robo. Al tratarse de una forma económica de localizar objetos, se pueden colocar etiquetas en prendas de ropa y todo tipo de artículos. Se pueden encontrar en supermercados, bibliotecas e incluso para desbloquear sistemas antirrobo instalados en cerraduras. Y también, gracias a su avanzada tecnología puede combinarse con elementos relacionados con la seguridad, previniendo, de esta forma, posibles robos en las tiendas de venta o almacenes. Algunas empresas que no cuentan con un espacio contratan el servicio de terceros para el alquiler de almacenes en Lima y puedan liberar el espacio de sus propios locales.
Entre los principales problemas que podemos encontrar en la cadena de suministros es identificar y localizar de manera automática cualquier producto que precisemos. Además, los usuarios conocerán con precisión y a tiempo real el stockage de cada producto e incluso la empresa podrá saber si un determinado artículo no está colocado donde le corresponde. Igualmente, podrán disponer de la información de cuándo ha sido extraído un artículo y dónde se encuentra ubicado; para así confirmar si dicho traslado tiene los permisos pertinentes para realizarlo. Esto permite reducir notablemente los tiempos de gestión, aumenta la productividad y disminuye los niveles en el inventario. Es decir, mejora notablemente la gestión integral de un almacén.
También te ofrece la solución a la clasificación de productos envueltos o con varios packaging de los cuales necesitamos capturar datos. Con la tecnología RFID esto no será un problema, ya que permite realizar la lectura sin necesidad de un contacto directo con el producto, ni siquiera es necesario estar cerca del mismo.
Software y RFID
Con el fin de garantizar un incremento en la eficacia y productividad de una instalación al incorporar un sistema RFID, es habitual integrar los terminales de radiofrecuencia en un sistema de gestión de almacenes. Esto permite eliminar los errores logísticos derivados de la gestión manual.
De esta manera, esta tecnología posibilita la reducción de roturas de stock en el almacén, al permitir un control más exhaustivo de nuestra mercancía.
Facilita un ahorro en costes y tiempo en el almacén, ya que una mayor precisión facilita tener un stock más ajustado a nuestras necesidades y así también, el control del estado de la mercancía, dado que podemos acceder a las fechas de caducidad de cada producto. Es especialmente útil en industrias donde la trazabilidad del producto es indispensable, como la agroalimentaria o la farmacéutica.
¿Puedo aplicar dicha tecnología exitosamente en mi almacén?
La respuesta es muy simple… ¡Claro que sí! Con avanzar en las tecnologías de gestión modernas obtienes un flujo de trabajo más eficiente, todo esto resultará en una innegable mejora de la productividad y el rendimiento de tu nómina a la hora de gestionar el almacén. Así, podrá dedicarse a otras tareas de mayor valor añadido, debido a que eliminar la necesidad inmediata de intervención humana, la misma genera la reducción en costes de operación y de personal, incluso, podrás generar un plan de corto a mediano plazo en tu inversión y alcanzar su retorno de forma mucho más rápida.
Permite un control sobre la trazabilidad del producto mucho mayor que su predecesor gracias a una mayor precisión y facilidad de uso. De hecho, un estudio de la Universidad de Arkansas señala que las empresas que implantan RFID reducen en un 16% sus roturas de stock.
En resumen, la versatilidad del sistema RFID aplicado a este ámbito reduce, casi al 100% los errores que se cometen con otro tipo de sistemas, sin olvidar que los datos se obtienen al momento, con lo que eso agiliza las cosas. Todo esto, con el objetivo especial de automatizar procesos, reducir errores, tiempos de ejecución y mejorar así las condiciones laborales de los trabajadores, consiguiendo una empresa más eficaz y productiva.
Luego de exponerte todo lo que ofrece un sistema de alta gama como el RFID, ¿no es una garantía de éxito total para tu almacén?
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