El 26 de enero, el Ministerio de Salud del Perú (Minsa) emitió una alerta sobre el riesgo de casos importados de sarampión-rubéola (SR) y de síndrome de rubéola congénita (SRC). El objetivo de dicha alerta es reforzar la vacunación y la vigilancia epidemiológica en todos los centros de salud del país.
Debido a que el sarampión y la rubéola son dos enfermedades virales que afectan principalmente a menores de edad, sobre todo a los niños más pequeños, es importante aplicar ciertas medidas de prevención para reducir el riesgo de contagio.
El sarampión se transmite por el aire cuando individuos afectados estornudan, tosen o simplemente respiran cerca de otros.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el sarampión es una de las enfermedades virales más comunes y se caracteriza por ser extremadamente contagiosa. Se transmite por el aire cuando individuos afectados estornudan, tosen o simplemente respiran cerca de otros.
El sarampión representa una amenaza para la salud, especialmente en niños menores de 5 años, ya que tienen más riesgo de contagio y son los más vulnerables a las complicaciones que puede presentar esta enfermedad viral, tal como señalan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Esto se debe a que, a pesar de que el sarampión puede afectar a individuos de cualquier edad, los niños son especialmente susceptibles porque sus sistemas inmunológicos se encuentran aún en desarrollo.
A diferencia de los adultos, el sistema inmunológico de un niño está aprendiendo a reconocer y combatir patógenos debido a que él no ha estado expuesto a una amplia gama de virus y bacterias, lo que significa que tiene menos inmunidad adquirida a enfermedades específicas como es el caso del sarampión.
Síntomas del sarampión: Los síntomas del sarampión aparecen entre 10 y 14 días después de la exposición al virus y, de acuerdo a Mayo Clinic, son los siguientes: Fiebre, Tos seca,Goteo de la nariz, Dolor de garganta, Ojos inflamados (conjuntivitis), Manchas blancas diminutas con centro blanco azulado y fondo rojo dentro de la boca, en la cara interna de la mejilla, sarpullido caracterizado por manchas grandes y planas que, generalmente, se funden entre sí.
¿Cómo prevenir?
La vacuna contra el sarampión ha demostrado ser segura y eficaz, debido a que ofrece una protección efectiva contra esta enfermedad viral: no solo previene el desarrollo de la enfermedad en quien recibe la vacuna, sino que también reduce el riesgo de transmisión a terceros.